Los que conocemos a Sofía sabemos de su ilusión por empezar este año el colegio en la sala de P3, así como la que tenían sus padres y hermanos que se desviven para que se integre social y educativamente. Sin embargo y debido a que presenta Síndrome de Down, en su día a día escolar necesita de la atención permanente de una Asistente Técnica Educativa (ATE) con todos los requisitos para recibir la educación y las condiciones que le corresponden.

Mediante un comunicado remitido por la FAPA Formentera con el apoyo de APIE y de la APIMA del CP Mestre Lluís Andreu denunciaron ayer lo que denominan «la vulneración de un derecho fundamental por parte del Govern Balear a una alumna con necesidades especiales y que ha visto como no se le ha asignado de forma permanente una Asistente Técnica Educativa (ATE) que debería tener garantizada por su condición».
En el escrito destacan: «más allá del actual marco legislativo español que identifica la inclusión educativa como derecho fundamental, existe un dictamen a favor de esta asignación a partir de un estudio exhaustivo por parte de la profesional educativa que acompañó a Sofía todo año pasado en la escuela».

Dicha recomendación se vio ratificada en junio cuando el equipo directivo del CEIP Mestre Lluís Andreu, contando con la asistencia de la mencionada orientadora, elaboró una solicitud por una ATE por la alumna a partir de los propios criterios que marca la Consellería d’ Educació del Govern balear.
Según explicó a Formenteraavui la madre de la pequeña, Yolanda Moya: «el colegio pidió tres ATE y solo han asignado una persona a tiempo completo y otra que va tres días a la semana que atiende a mi hija solo tres horas por semana».

Lo que sí tiene claro Yolanda y los representantes de las asociaciones antes mencionadas: «una sola maestra en un aula con 20 niños necesita colaboración para atender las necesidades especiales de pequeños como Sofía, por lo que es fundamental disponer del apoyo que ofrece el auxiliar técnico».
Según se manifiesta en el documento, Sofía cumple todos los requisitos para disponer de una ATE: «así lo corrobora el baremo de puntuación existente y se le está negando de forma fraudulenta», apuntan desde las asociaciones. Añaden, además: «la Consellería balear sí contempla, aunque no está garantizado al cien por cien, una ATE adicional a partir del segundo trimestre».
Ante tal escenario, opinan: «Es inaceptable y contradictorio si consideramos que, a parte de su diversidad funcional, Sofía tiene ante sí una adaptación decisiva desde la guardería al ciclo de educación infantil».
Desde las asociaciones exigen: «La inmediata revisión del caso para que Sofía, un claro ejemplo de agravio comparativo dentro del sistema de enseñanza pública, pueda disfrutar de la educación de calidad a la que tiene derecho».