Gent per Formentera ha emitido una nota de prensa en la que se destacan como «muy graves y antidemocráticas» las consecuencias del informe emitido por el secretario de la institución y una letrada, con firma electrónica del 16 de julio de 2024, que blinda al presidente Llorenç Córdoba y, en nombre del interés general, le permite gobernar en solitario el Consell Insular con un presupuesto de cerca de 43,5 millones de euros.
Según apuntan desde el partido en la oposición, «esta solución jurídica ya fue llevada al pleno extraordinario del 11 de julio y no contó con el voto favorable de ninguno de los partidos políticos que conforman el plenario del Consell Insular de Formentera, obteniendo 16 votos en contra de 17».
Asimismo señalan que «este informe, firmado cinco días después, no nos consta que se encuentre publicado en la página de transparencia del Consell Insular de Formentera ni se ha dado cuenta del mismo en el pleno ordinario del pasado 24 de julio. Además, modifica el funcionamiento de la administración insular por la puerta de atrás sin ningún acuerdo político traicionando la voluntad expresada, por amplísima mayoría, en el plenario del
Consell Insular».
En este sentido añaden que en el plenario extraordinario del 11 de julio «también se comunicó que se remitiría la falta de gobernabilidad de la administración insular al Consell Consultiu de las Islas Baleares, para encontrar el mejor encaje jurídico por la situación insólita y de caos más absoluto en la que, un presidente expulsado y una coalición de Sa Unió irresponsable y dimitida, han sumido al Consell de Formentera».
El comunicado de GxF expresa también que en el pleno ordinario de julio, «Gent per Formentera preguntó directamente al secretario sobre esta cuestión, si ya se había enviado la consulta y cuál era el contenido de ésta, y la respuesta fue que ésta todavía se estaba elaborando». La portavoz del partido, Alejandra Ferrer, pidió explícitamente que, puesto que el Consell Insular de Formentera no cuenta con la Junta de Gobierno ni con vicepresidencias, «se consultara si ya nos encontramos en un claro caso de inviabilidad de la institución insular por parálisis».
Ante la actual situación, GxF concluye que «ahora mismo tenemos a un presidente, sin apoyo, ungido de poder absoluto por decidir sobre la totalidad de los recursos del Consell de Formentera escapando del control y la fiscalización del plenario. Gent per Formentera no puede avalar esta forma de gobernar ni la normalización de los graves actos políticos vividos en la institución».
