Simona Colzi (Florencia, Italia, 1978) proviene de una familia dedicada por generaciones al mundo textil, desde la fabricación de telares hasta la confección y bordado de prendas de vestir y ropa de casa. A los 18 años comenzó a trabajar en sus propias creaciones con bolsos de tela y elementos decorativos que vendía en ferias artesanales, festivales y mercadillos de su país, para luego trasladarse a Barcelona donde compartió un taller tienda durante ocho años con otros diseñadores y realizó estudios de arte textil en la Escuela Massana que la llevaron a la creación de tapices y cuadros realizados con distintas telas.
En 2004 llegó a Formentera con su bagaje creativo e inició su andadura en la Fira Artesanal de la Mola y en el Mercadillo de es Pujols. Hace cuatro años descubrió un mundo nuevo cuando comenzó un original trabajo creando prendas de seda estampadas con tintes naturales extraídos de hojas y flores recolectadas en la isla y decidió apostar por ello.
Estampación botánica
Para llegar a dominar la técnica, Simona Colzi cursó diversos talleres en Barcelona y Madrid y pasó también por una residencia artística en Amsterdam especializada en estampación botánica. “Para realizar la estampación botánica es necesaria una preparación previa del tejido con el mordente, una receta que incluye varios tipos de minerales y que permitirá la absorción del tinte natural y su fijación sobre la tela”, explica la artesana a FormenteraAvui.
Para los estampados naturales Simona apuesta por vegetales que se encuentran en la isla como las hojas y corteza de eucalipto, el falso pimentero cuya hoja se asemeja a la del helecho, hinojo en flor, edril, margaritas silvestres y también las rosas o los geranios que crecen en su jardín. Además, aunque en menor medida, incluye la cochinilla de Canarias y este año ha sumado la hoja de olivo y el lentisco. “El otoño, el final del invierno y la primavera son mis épocas ideales para pasear por la isla y recoger las plantas que necesito y que aplico frescas sobre el tejido que luego prenso, ato y lo someto a cocción en agua durante unas dos horas para posteriormente dejarlo reposar un par de días antes de desatarlo. La mayoría de las prendas de vestir las realizo en seda natural y luego los tapices y otros elementos los trabajo sobre lino”, detalla la experta.
Si algo destaca en el trabajo artesanal de Simona Colzi es la gama de colores que obtiene en el proceso de teñido y estampación de las diferentes plantas y que abarca un amplio abanico de tonalidades crudas, marrones, ocres y verdes, sin olvidar los tonos más vivos incluidos en las últimas colecciones como el amarillo dorado que obtiene de la piel de la cebolla, los verdes más intensos de la piel de la granada y el magenta que proviene de la cochinilla.
Con respecto a la elección del kimono como prenda emblema de su firma, Simona señala que lo que le interesa es “que la prenda sea una pieza de arte para llevar, por lo que tiene que ser ancha, sin costuras ni pliegues en la espalda y en las mangas para que luzca el estampado y, en este sentido, el kimono es una prenda muy versátil a la hora de reflejar y apreciar el trabajo que realizo sobre las telas”.
Con carta de artesana textil desde hace más de una década, Simona produce toda su colección en la isla que comercializa en su taller y vía on-line y su clientela está formada mayoritariamente por mujeres a partir de 30 años. Además participa desde hace dos años en la Pasarela de Moda de Formentera con sus últimas colecciones y destaca el nivel creativo y de calidad de la artesanía que se produce en la isla. “La isla atrae a un tipo de persona que le gusta la belleza, la vida tranquila y el paisaje que se convierten en una fuente de inspiración para todos a la hora de crear nuestros trabajos”.