El equipo de asesores y los familiares de un paciente intervenido quirúrgicamente en el Hospital de Formentera y que quedó parapléjico tras una operación de rutina denuncian la pasividad y el silencio de la Administración ante la reclamación por negligencia médica presentada a comienzos de 2021.
Según se ha traslado a los medios, el paciente de 58 años, residente en Formentera, fue intervenido por una hernia inguinal, “una operación común, que se complicó con una hemorragia en la médula espinal que tardó tres días en ser operada. Lo ocurrido le ha dejado de manera irreversible y permanente postrado en una silla de ruedas”.
La intervención se llevó a cabo el 16 de noviembre de 2020 en el Hospital de Formentera y durante la misma el paciente presentó sangrado que se complicó y se decidió su traslado al Hospital Can Misses donde ingresó al día siguiente.
En el hospital ibicenco el enfermo manifestó dolores punzantes muy intensos en la espalda, ante lo cual le suministraron analgésicos y calmantes. Así continuó el día 18, a base de calmantes que no le hacían efecto, hasta que la madrugada del día 19, dejó de sentir las piernas y resto del cuerpo de cintura para abajo. “Aun así, esperaron a que se hiciera de día para hacerle un TAC que detectó una hemorragia y que conllevó a la decisión de suspender el tratamiento con anticoagulantes que le estaban administrando y su traslado para ser operado de urgencia en la Clínica del Rosario, pero los daños no pudieron revertirse quedando parapléjico”.
Proceso de reclamaciones
Ante la reclamación presentada por el familia, el Consell Consultiu de les Illes Balears emitió un dictamen preceptivo en el que aplicaba la doctrina del “daño desproporcionado” considerando que el paciente debía ser indemnizado, pero aun así, la Conselleria balear de Salut desestimó la reclamación.
Así las cosas, y visto el mencionado dictamen, se recurrió la resolución ante la propia Conselleria el pasado mes de junio y cinco meses después, la Administración todavía no se ha pronunciado al respecto. Cabe destacar que en la reclamación inicial presentada, el particular reclamaba una indemnización dada la paraplejia y la invalidez total e irreversible que se le ha causado, obligando a la familia incluso a dejar la isla y trasladarse a la Península, más cerca del Hospital de parapléjicos de Toledo, para brindarle una mejor atención.
La familia destaca además que “si la Administración finalmente desestima el recurso planteado el perjudicado tendrá que recurrir ante los tribunales”. Asimismo añaden que “se trata de visibilizar una situación flagrante, con un resultado desproporcionado (en palabras del propio Consell Consultiu) ante el estado precario en que ha quedado el paciente, desde que empezamos con la reclamación en 2021 y ahora que han transcurrido ya cinco meses desde que interpusimos el recurso. Estamos ante el mal hacer de la Administración que mira hacia otro lado”.