“El mercado de la Mola me dio pie para desarrollar mi creatividad y mi forma de vida” Entrevista a Xenia García-Marià

Con carta de artesana desde 2007, Xenia valora muy positivamente el nivel de la artesanía que se hace en Formentera

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Xenia García-Marià en su taller de la Mola
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Xenia García-Marià nació en Barcelona, estudió parte de la carrera de Antropología, fue a Suiza durante cinco años a trabajar en la recogida de la fruta, en el año 1992 inicia su andadura entre Ibiza y Formentera y en 1994 comienza a vender sus creaciones en la Fira Artesanal de la Mola y se instala en la isla.

«Llegué a Ibiza en el 92, empecé a trabajar un poco la plata con mi hermano que estaba de aprendiz de un artesano de la isla. Además siempre me ha gustado dibujar y las acuarelas, jugar con los colores y en esa época aprendí a relacionarme con los metales por eso me considero una artesana joyera que trabaja los metales”, explica Xenia en su taller ubicado en la Mola.

Xenia García-Marià tiene carta de artesana desde el año 2007

Xenia destaca por sus trabajos de calado en plata que requieren mucha precisión y minuciosidad, aunque también le encanta fundir plata, «martillearla, maltratarla», hasta obtener un resultado. Una vertiente «que me gusta hacer cuando quiero descansar del trabajo fino y exacto».

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Si bien la plata es el metal que más trabaja con diferentes texturas, también crea algunas piezas que llevan formas en alpaca o en cobre pasado por un proceso de oxidación. Además muchos de sus trabajos incluyen piedras semipreciosas que “me encantan por sus formas y sobre todo por sus colores que le dan su punto a muchas de las joyas que hago».

Con la inspiración marcada por la naturaleza de la isla y por los recuerdos, Xenia crea colgantes, pendientes, collares y entre las piezas que nos muestra destaca una hebilla de cinturón en plata muy especial. «Esta hebilla que he hecho con la Joven Dolores es muy especial ya que para mí marcó una época personal muy intensa y creativa», destaca la artesana.

Xenia ha realizado esta hebilla con la imagen de la Joven Dolores

Enamorada de la Mola

Como apuntábamos al inicio, Xenia lleva desde 1994 en la Fira Artesanal de la Mola tarea que compagina con una parada en el mercadillo de la Savina.

«Soy una enamorada y una defensora del mercado de la Mola, ya que en su momento me dio pie para desarrollar mi creatividad y una forma de vida. A veces hecho la vista atrás y digo: a pesar de todas las crisis y los cambios el mercado funciona», comenta con una sonrisa.

Con respecto a su paradeta la artesana destaca que en su mesa «hay un poco de todo, desde piezas más simples y económicas a collares muy elaborados que cuestan más de vender pero visten la mesa y son una muestra de mi trabajo. Además soy muy de decir al cliente: pruébatelo, mira como te queda, para que no se queden con las ganas y muchas veces se lo acaban llevando».

En materia de clientes Xenia destaca que cuando empezó «venía mucho alemán que le gustaba mucho la plata, que no le importaba gastar el dinero ante una pieza bien hecha y de calidad y que pesara, nada de sutilezas. Esa gente se fue haciendo mayor y ahora algunos pocos todavía vienen porque se ha generado un simpatía con el paso de los años. Luego vino la época de los italianos, que te permitía jugar con piezas más sutiles, con más fantasía, y ahora hay más gente joven, hemos perdido el italiano fantasioso, y ha venido un turismo español más conservador».

La artesana joyera Xenia García-Marià con algunas de sus creaciones

Después de esta descripción del público, Xenia puntualiza que ahora con la Covid es todo muy distinto «aunque he podido comprobar que tengo clientela fiel, que pasa a verme, que te muestra una pieza que te compró hace años y eso le pasa a todos los que estamos en el mercadillo».

Con carta de artesana desde 2007, Xenia valora muy positivamente la artesanía que se hace en Formentera así como el «colegueo» y la ayuda entre los del oficio. «Hay mucha gente creativa que hace muy buenos trabajos, originales y de calidad», destaca sin olvidar a los pintores que exponen en la Mola «porque aportan otra visión creativa al mercado».

 

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