El músico y compositor Pau Donés ha fallecido hoy, a los 53 años de edad, después de atravesar varios años intentando superar un cáncer de colon.
Como me contó en una entrevista que le hice en mayo de 2017 cuando ya conocíamos de la enfermedad, al cáncer lo llama «cangrejo» para quitarse y quitarnos el mal rollo que genera solo la mención de la palabra.
En ese momento había cumplido 50 años y festejado además sus 20 años al frente de la banda Jarabe de Palo con la que cosechó éxitos que todos conocemos como La Flaca, Depende o Bonito que forman parte de una banda sonora común para muchos seguidores o no de su música.
También hablamos del primer libro que había publicado, 50 palos… y sigo soñando, editado por editorial Planeta, en el que «hablo de libertad, sexo, muerte, humildad, éxitos y fracasos. He llegado a la conclusión que más que vida he tenido un «vidón», sobre todo en términos de libertad».
Una libertad que quiso seguir, combinada con los tratamientos médicos, y por lo que contó en los últimos meses en diferentes medios le había permitido profundizar en la relación con su hija, «lo mejor que me ha pasado» me decía, y continuar con la música con la publicación de un video clip de una canción del álbum, titulado Tragas o escupes, que estaba a punto de sacar al mercado.
Ligado a Formentera, durante años pasó largas temporadas disfrutando del mar y de su casa en Porto Saler, visitando a amigos y tocando con músicos de la isla con los que tenía una muy buena relación.
Descansa en paz, vecino Pau.
