Como cada 14 de abril, fecha en la que se conmemora el aniversario de la proclamación de la Segunda República, Formentera ha acogido un sencillo acto en los terrenos de es Campament, la antigua colonia penitenciaria de la Savina que funcionó en la isla entre 1940 y 1942 y en la que murieron de hambre y enfermedades un importante número de prisioneros.
Ante los vecinos congregados, el historiador Artur Parrón ha dado lectura a un manifiesto, este año conjunto con otras asociaciones por la memoria de Baleares, en el que se ha destacado la imposición de la extrema derecha de derogar la Ley Balear de Memoria Democrática, “lo que significaría nada menos que la supresión de derechos a víctimas que han sufrido graves violaciones contra los derechos humanos y, de nuevo, la imposición del relato oficial sobre la República, el golpe de estado, la guerra y la dictadura que durante muchos años estableció el régimen franquista”.
En este sentido se ha pedido al Partido Popular, que conforma el Govern de las Islas Baleares, “que sea consecuente con los principios democráticos y no derogue la Ley de Memoria Democrática, dejando desamparadas a las víctimas del fascismo de la Comunidad Autónoma de las Islas Baleares y que no prive a su ciudadanía de su historia y de los derechos a la Verdad, a la Justicia, en la Reparación, en las Garantías de no repetición y en la Memoria, principios en los que precisamente se basa esta ley”.
En el encuentro se ha rendido homenaje “a todas las víctimas del fascismo, a todas aquellas personas que defendieron la democracia ante el golpe de estado fascista de 1936 y aquellas que lucharon por las libertades democráticas durante los 40 años de la dictadura franquista”. Un acto que ha culminado con el lanzamiento de una ofrenda floral con los colores de la bandera republicana al Estany des Peix en recuerdo a los represaliados por la dictadura.
