El Plan de Actuaciones en Fosas de la Guerra Civil 2021-2022 del Govern de las Islas Baleares prevé llevar a cabo una primera actuación en el cementerio nuevo de Sant Francesc Xavier, en Formentera. Así lo aprobó la Comisión Técnica de Desaparecidos y Fosas de las Islas Baleares el pasado 19 de noviembre, un órgano que cuenta con la participación del Foro para la Memoria de Ibiza y Formentera.
Dicho Plan se ha presentado hoy en la isla por parte del secretario autonómico de Memoria Democrática y Buen Gobierno, Jesús Jurado, así como el Estudio histórico del cementerio nuevo de Sant Francesc Xavier, elaborado por Antoni Ferrer Abárzuza por encargo de la empresa ATICOS dentro del Plan de Fosas 2019-2020. Este acto ha contado con la presencia de la vicepresidenta del Consell, Ana Juan, la consellera de Patrimonio del Consell de Formentera, Raquel Guasch, y del historiador Antoni Ferrer.
Por su parte, la consellera de Patrimonio de Formentera ha agradecido al Govern balear «la acción firme para recuperar esta parte de la memoria histórica y dignificar las 58 víctimas mortales, una acción básica para ser una sociedad más civilizada y avanzada y poder finalmente tapar heridas». Asimismo ha destacado el estudio histórico realizado por Antoni Ferrer y ha señalado que «queda una asignatura pendiente que es la dignificación del Campament para que sea un espacio donde también se recupere la memoria histórica».
Investigaciones y estudio
En Formentera, la actuación prevista en el cementerio es una de las más importantes que se llevarán a cabo, por el número de víctimas que se podrían localizar y la delimitación clara de las zonas donde sería viable la exhumación. La incorporación de esta actuación dentro del tercer plan de exhumaciones es fruto del estudio histórico elaborado por Antoni Ferrer, que da por definitiva la cifra de 58 víctimas mortales del penal de Formentera entre 1941 y 1942 y define tres lugares del cementerio de Sant Francesc donde se pueden llevar a cabo intervenciones viables para tratar de localizar sus restos.
El informe, elaborado a partir de las investigaciones llevadas a cabo hasta la fecha y de las aportaciones de diferentes testigos, recoge las condiciones inhumanas en que vivían los presos en Formentera: amontonados, en instalaciones insalubres y con una falta generalizada de alimentos que los vertía al hambre y, finalmente, a la muerte.
Para determinar la cifra exacta de víctimas mortales de la prisión de Formentera, Antoni Ferrer añade nuevas fuentes documentales. Hasta ahora se habían analizado los libros del Registro Civil de Formentera y el libro de defunciones de la parroquia de Sant Francesc Xavier, y ahora se añaden dos fuentes más, hasta ahora inexploradas: los expedientes de Administración de Justicia del Archivo del Consell de Formentera y los padrones municipales de habitantes. Los resultados son coincidentes y corroboran la cifra de 58 víctimas mortales.
Sobre el lugar de inhumación de las víctimas, el estudio explica que el cementerio nuevo de Sant Francesc se inauguró en 1940, unos meses antes de que se produjera la primera muerte documentada en prisión de Formentera, fechada en abril de 1941. Si bien no se encontraron testigos directos de aquellos enterramientos, sí hay dos testigos secundarios que coinciden en indicar como posible ubicación dos de los cuatro cuadrantes de los que consta el cementerio nuevo, ubicados en la parte oeste y que ya estaban construidos en 1938. El historiador concluye, a partir de la documentación consultada, que las inhumaciones se hicieron de acuerdo con el rito cristiano católico y, «lo que no podemos saber es si en su día las tumbas estaban identificadas».
El estudio incluye, como novedad, no sólo información de las víctimas mortales sino también de la totalidad de personas que estuvieron encarceladas en el penal de Formentera, cerca de 1.500 nombres, a partir de la transcripción de listas de los padrones y su procesamiento .