Las Islas Baleares serán el primer destino turístico de España que comenzará a recibir visitantes extranjeros a partir de la segunda quincena de junio, después de que el Govern balear haya obtenido la autorización del Estado para hacer una prueba piloto con un grupo reducido de turistas al archipiélago. Así lo anunció la presidenta del Govern, Francina Armengol, acompañada del conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, esta tarde en rueda de prensa.
«Es un reto muy importante para situar las Islas una vez más como destino seguro y de calidad», recalcó Armengol, y ha explicado que existen «los protocolos de seguridad laborales y sanitarios para poderlo hacer».
La presidenta ha asegurado que la puesta en marcha del plan piloto supondrá que las Islas Baleares «se pongan en marcha para poder tener una temporada mucho más fluida» durante el resto de meses del año. «El objetivo era poder abrir de manera segura para residentes, trabajadores y turistas», ha apuntado.
El objetivo es plantear corredores seguros para las cuatro islas con Alemania, un mercado emisor idóneo para hacer este tipo de pruebas, ya que tiene una situación epidemiológica muy similar a la de Baleares.
Por su parte Negueruela ha destacado la importancia que «Baleares se convierta en el primer destino de España que se abre al turismo internacional, ya que se trata de un impulso para recuperar la normalidad, y no sólo para el sector turístico, sino también para que nuestros trabajadores recuperen sus puestos de trabajo», manifestó.
Durante la realización de la prueba piloto, se probará la eficiencia de los protocolos de seguridad e higiene aprobados en las últimas semanas en Baleares «para que el inicio de la recuperación de los flujos turísticos se haga bajo las máximas medidas de seguridad y el archipiélago siga siendo una referencia y un ejemplo de destino seguro en España y en Europa».
Llegada de vuelos escalonada
Las llegadas de turistas comenzarán la segunda quincena de junio y tendrán una duración mínima de cinco noches y máxima de catorce días. En esta línea, la llegada de los vuelos será escalonada, a lo largo de varios días, para facilitar el control de los turistas por las autoridades y para evitar cualquier contratiempo que pudiera poner en peligro la experiencia. En esta línea, las pruebas comenzarán con grupos reducidos en Mallorca en dos zonas diferentes (Playa de Palma y Alcudia).
En total, está previsto que lleguen a todas las islas unos 10.900 turistas como máximo gracias a esta prueba piloto. Se trata de una cantidad que apenas supone el 0,91% del total de visitantes que Baleares recibieron durante la misma quincena de junio del año pasado, una cifra representativa para poder hacer la prueba con las máximas garantías de seguridad .
Asimismo el Govern balear será el responsable tanto de la coordinación de estos vuelos como de su organización, y podrá establecer los cupos y límites apropiados para asegurar que este plan piloto se desarrolla bajo las más estrictas condiciones de seguridad y que se cumplen todos los protocolos de sanidad recogidos en las Órdenes Ministeriales correspondientes.
