El grupo político Sa Unió de Formentera ha presentado una proposición para instar al Consell Insular a iniciar un estudio del estado actual del ganado de la isla y para que ponga en marcha de manera urgente un plan para su recuperación.
El portavoz de la agrupación, Lorenzo Córdoba, ha destacado que en la última década, tanto el número de explotaciones como el número de pequeños rumiantes (ovejas y cabras) se han reducido a más de la mitad, «lo que significa una gran pérdida de la cabaña ganadera de la isla».
Córdoba ha explicado que “hay que tener en cuenta que la importancia de la ganadería de la isla no se basa solo en la producción de alimentos sino que significa una parte muy importante de nuestra cultura, patrimonio y costumbres como formenterenses, ya que las explotaciones existentes mantienen el paisaje típico de la isla y, sin ganado, los campos, los corrales, las paredes de piedra se abandonan y degradan”.
Además ha recordado que desde antes de la creación del Consell de Formentera “se iban realizando acciones planificadas para fomentar el mantenimiento tradicional de las explotaciones ganaderas de la isla y estas han dado como resultado el saneamiento y control de la salud de la cabaña ganadera, la reapertura de la Cooperativa del campo y la apertura del matadero de Formentera, entre otras medidas, pero otras muchas que estaban previstas para potenciar la ganadería se han quedado sin hacer».
Entre estas ha señalado el proyecto “Carne certificada de Formentera” que, según el portavoz de la coalición, “hubiera ayudado a dar un impuso a la producción de ovino y caprino en la isla, además de hacer que las explotaciones rentabilizaran su producción».
También ha apuntado sobre un «extenso estudio realizado del queso de Formentera con la intención de incentivar la comercialización de este producto tan típico de la isla y, tampoco en este caso se aprovechó el trabajo ya realizado”.
Para el portavoz de Sa Unió, a día de hoy, “las acciones que se realizan sobre la ganadería de la isla son de rutina, se aplica un plan sanitario y se van tratando los problemas así como se van produciendo, de manera reactiva. No hay proactividad, no existe previsión ni planes de futuro para mantener e incentivar esta actividad tan importante para la isla”.