– Ha venido a Formentera a presentar una campaña organizada por el PSIB para informar a los ciudadanos sobre diversos temas, ¿no es así?
Así es. Esta campaña, que hemos iniciado desde el PSIB hace un mes y medio, en este caso se refiere a trabajo y para ella hemos contado con invitados como los representantes sindicales José Luís García, secretario general de CCOO y Alejandro Texías, secretario general de UGT, junto al secretario general del partido en Formentera, Rafa Ramírez, para explicar las políticas que se están llevando a cabo en este tema. Luego habrá otros encuentros para hablar de vivienda, servicios sociales, educación y sanidad.
– Desde su partido se habla de un empleo digno, pero, ¿qué es un empleo digno?
Es una buena pregunta. Cuando hablamos de un empleo digno y de calidad nos referimos a aquel que permite a la gente vivir de su trabajo, tener una vida en condiciones y satisfacer sus necesidades. Esto se demuestra a través de de unos estándares de calidad, de unas jornadas laborales que respeten la normativa laboral, los descansos, los horarios, los períodos de vacaciones y que los salarios sean acordes con ese trabajo y acordes al convenio colectivo. Asimismo conseguir que los contratos de trabajo no sean precarios. Este es el marco en el que trabajamos desde la Comunidad Autónoma, con un gobierno estatal distinto que se basa en una reforma laboral obsoleta y que constituye un freno a la recuperación económica de la ciudadanía. Si se levantase esa normativa, que es una losa para la ciudadanía, veríamos una mejoría.
– Desde hace bastante tiempo, tanto en Eivissa como en Formentera, el binomio «empleo cualificado y vivienda» es casi imposible. ¿Qué soluciones planteáis a esta situación?
Yo no lo calificaría de imposible, sino de una cuestión que hay que mejorar y que no se puede obviar, así como el empleo precario. Desde la administración autonómica se buscan soluciones pero también es necesario que la administración del Estado de pasos en este sentido. Con respecto a la vivienda sabemos que es un problema real por lo que hay que seguir consolidando políticas estables que permitan el acceso a viviendas públicas. Si cada cuatro años se cambian estas políticas no podemos estabilizar un trabajo ordenado y que en el tiempo tengan un recorrido. Construir viviendas no es de un día para el otro sino que hay que sentar las bases para disponer de suelo, un IBAVI fuerte que pueda ejecutar nuevas promociones y dar así respuesta a uno de los principales problemas que tiene la ciudadanía.
– En materia de contratación laboral, las temporadas, se van acortando año a año. ¿Existen soluciones reales para evitar esto?
Con los resultados de contratación del pasado mes de abril, estimamos que se empieza a recuperar el disponer de temporadas más largas tanto en Formentera como en Eivissa. Los datos de empleo lo corroboran con números al alza pero es necesario tener más meses para poder acceder a una prestación mínima y hacia ese objetivo debemos ir. En los meses de verano hay mayor precariedad por eso se ha establecido desde el pasado año un sistema de inspección, con agentes que trabajan aquí y pueden realizar un mayor control para evitar condiciones de trabajo irregulares.
– ¿Crecimiento turístico versus empleo digno?
Cuando el principal motor económico es el turismo tienes que conseguir un empleo digno y de calidad. Si esto no ocurre tendríamos un desajuste social importante. Yo creo que se puede y se debe vivir del sector turístico pero garantizando la calidad de vida de aquellos que trabajan en el sector. Es una industria que genera recursos y, por ejemplo, el convenio de hostelería ha mejorado con un incremento salarial con respecto a otras regiones del territorio español.
– De todos es conocido el movimiento de «las kellys». En su mayoría mujeres que, debido a su trabajo como limpiadoras, sufren problemas físicos evidentes y una gran parte de ellas tienen más de cincuenta años. ¿Cuáles son sus propuestas para este colectivo que es un puntal fundamental en la industria turística?
Sobre este asunto hay algo fundamental y es que se reconozcan las enfermedades laborales, que en estos momentos pasan por comunes, lo que significa una doble penalidad. Que una persona, por el hecho de trabajar durante muchos años en una tarea física y repetitiva acabe teniendo una enfermedad crónica es algo que no debería de suceder. La gente no tendría que padecer una enfermedad o un accidente laboral por hacer su trabajo y luego recibir una prestación que resulta muy pequeña al considerarse como enfermedad común, como por ejemplo el síndrome del túnel carpiano. En el ámbito estatal se han reconocido patologías laborales en otros ambientes más masculinizados como en el sector de las fábricas y, sin embargo, no se ha tenido en cuenta el trabajo de las camareras de piso.
– Ya que se encuentra en la isla como representante del PSIB, ¿cuáles son las perspectivas de su partido para las próximas elecciones?
Positivas. Estamos haciendo políticas de cambio importantes y sentando las bases para mejorar las islas. El partido está preparado y esto se ve. Esperamos conseguir un gobierno de cambio junto a otras fuerzas progresistas. Sin embargo nos preocupan las propuestas de partidos como Ciudadanos que en materia laboral pretende políticas más duras que las del PP, propuestas basadas en los intereses empresariales. Ante esa derecha que se viene organizando en Europa bajo la excusa de «somos distintos», lo que demuestran es una gran presencia conservadora y de una política económica ultraliberal que perjudicaría la recuperación de la clase trabajadora.
– Por último; ¿Cómo ve la relación de su partido con el que gobierna en la isla con mayoría absoluta, Gent per Formentera?
Hemos gobernado juntos y ahora también en el Parlament balear y tenemos un entendimiento correcto que nos ha permitido que se aprueben distintas leyes que benefician al conjunto de los ciudadanos. Son relaciones que es importante mantener para cambiar las cosas.