«Es un premio muy repartido», ha sido la frase más escuchada esta mañana en Formentera cuando pasadas las diez horas se conocía que uno de los quintos premios, el 18065, había recaído en la isla en concreto en la parroquia de Sant Francesc.
El párroco de la isla, Miguel Ángel Riera, fue el encargado de comprarlo en la única administración de la isla, ubicada en Sant Francesc. «El número fue elegido al azar y adquirimos 60 series, un total de 600 décimos que fueron vendidos en distintos establecimientos por lo que está muy repartido», apuntó el párroco ante los periodistas.
Festejo
Si bien por la mañana todo eran llamadas de teléfono, abrazos y felicitaciones entre los vecinos, a las 13.00 horas el foco de atención se centró en la administración de lotería para el brindis con cava como merece la ocasión.
La nota la puso Emiliano Miguel, uno de los agraciados que con su habitual buen humor no dudó en entonar una canción y marcarse unos pasos de baile, jaleado por el público presente.
Entre los asistentes, Valeria y su pareja que llevaban un décimo, se mostraban muy contentos y prometían obsequiarse con una buenas vacaciones, mientras otros agraciados imaginaban unas fiestas diferentes compartiendo con familia y amigos y con la alegría de saber que son los primeros favorecidos por el sorteo de Navidad en Formentera, ya que nunca antes había tocado en la isla.
Enhorabuena a todos y a disfrutar de este pellizco que, en muchos casos, hará más leve la cuesta de enero.