«Pasé de ser una víctima a ser una activista»

La violencia machista en primera persona, a través de la voz de Marta Anguita protagonista del documental "La maleta de Marta"

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Marta Anguita en Sant Francesc
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Marta Anguita, protagonista del documental «La maleta de Marta», visitó esta semana Formentera para contar su experiencia como víctima de violencia de género ante jóvenes y adultos de la isla.

Marta conoció a quien sería su marido con 18 años y su enamoramiento le hizo tardar en darse cuenta de ciertas conductas de su pareja, devenido luego en agresor. Se casaron, tuvieron dos hijas y las cosas fueron a peor. «El maltrato no era físico, era psicológico con expresiones constantes como tú eres una mierda, yo soy el que vale y si me dejas lo vas a pasar fatal», comentó Marta a Formenteraavui. Esta situación deriva en una solicitud de separación por parte de Marta que la califica como «traumática, ya que no era de mutuo acuerdo, y que se vuelve más preocupante cuando la jueza decide separar a las niñas, una conmigo y otra con él».

Marta Anguita

Al año y medio de estar separados, su marido comete la agresión atropellándola con su coche, lo que le produjo la rotura de un brazo y una pierna, le asestó 16 puñaladas y le cortó el cuello con un cuchillo. «Por suerte no tocó la arteria carótida por lo que me pude salvar y en la ambulancia decían: se muere y yo pensaba que no me muero, que no», detalla Marta con gran entereza.

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Después de un mes y medio ingresada vuelve a su casa con las niñas que habían estado a cargo de un familiar y se encuentra sin el apoyo tanto de su familia como de la del agresor, que fue sentenciado a 15 años de prisión de los que cumplió 11 por buena conducta. «Para este mundo machista la culpable siempre he sido yo», sentenció.

A todo este panorama se suma la dificultad para cobrar una pensión y la indemnización y, después de haber apelado a todas las instancias y pedir apoyo a instituciones, una amiga le recomendó presentar su caso a Amnistía Internacional que lo recogió para presentarlo ante la Unión Europea como violación de derechos humanos y poder conseguir así que se le reconocieran sus derechos.

En la actualidad Marta se dedica a contar su periplo a jóvenes y adultos. «Pasé de ser víctima a activista», apuntó momentos antes de la proyección de «La Maleta de Marta», documental rodado por el director austríaco Günther Schwaiger y donde relata, en primera persona, su particular odisea para que se reconozcan sus derechos y los de sus hijas.

Con respecto a la acogida que reciben tanto el documental como su experiencia relatada en primera persona, Marta señala que es «muy buena» en todos los ámbitos. «Me alegro cuando la gente que lo ve no ha vivido una situación semejante pero también cuando las que sí lo han padecido, espero encuentren una salida al conflicto», resaltó.

Para Marta es «fundamental» que los jóvenes entiendan que no deben controlar a sus parejas, que es necesario que entiendan el significado del concepto «igualdad» y que la obligación por parte de las víctimas, en caso de agresión psicológica o física, es decir «hasta aquí hemos llegado». Para Marta es imprescindible denunciar las agresiones, «sino luego será más difícil conseguir una orden de alejamiento».

Después de charlar ante más de un millar de jóvenes en su periplo con «La maleta de Marta», Anguita reconoce que le emocionan las reacciones, las preguntas que le formulan y el interés que ponen en el tema, aunque siempre dedica unos minutos demás en sus conferencias y con carácter privado para escuchar a aquellos que se han visto reflejados y que desean plantearle cuestiones de carácter personal. «Es un tema complejo pero es mejor conocer las herramientas para salir adelante», concluyó.

 

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