El clima y el contenido del evento invitaban a disfrutar y así lo consideró el numeroso público que se concentró ayer en la plaza de Europa de es Pujols para celebrar y disfrutar de la décima edición de la Pasarela de Moda Formentera, así como para interesarse por el proyecto «Save Posidonia», impulsado por el Consell Insular y cuyo contenido dio a conocer la consellera de Turismo y Comercio, Alejandra Ferrer, encargada de abrir el evento.
«Esencias de una década», título elegido para la edición 2017, ha sido una pasarela repleta de color, alegría y con algún aire retro que recordó el espíritu «hippie» que todavía se respira en algunos, aunque pocos rincones de la isla.
La encargada de conducir el evento, Núria Arias, abrió la pasarela luciendo un modelo de la diseñadora Eva Cardona complementado con joyas de Enric Majoral para presentar el momento más entrañable de la noche cuando los más pequeños mostraron su saber hacer ante cámaras y público luciendo los modelos de la firma «Te doy la luna», entre los que destacaron los petos y los vestidos que daban un toque campestre a la propuesta.
La espontaneidad de los más pequeños arrancó sonoros aplausos por parte del público y se volvieron a repetir minutos después con el desfile de la colección de Eva Cardona para niños y que contó con la participación de la reconocida animadora de fiestas infantiles «Chiclerina».
En este caso el escenario se inundó de hadas, princesas y duendes adornados con coronas de flores y lazos de colores. Todo un homenaje a la fantasía del que disfrutaron grandes y pequeños, titulado «La petit Juliette».
La noche continuó con la presentación de la colección de zapatos y complementos de José Marcos de la firma «Ishvara» que también celebraba 20 años de pasarela y 35 de oficio con su colección «Orchidea».
Esta apuesta de la firma para la temporada 2017 se centró en bolsos, sandalias, cinturones y zapatos artesanales realizados en piel de alta gama, acompañados de sombreros y gorros que cerraban el conjunto.
El desfile dio paso al toque fresco de la colección de bikinis de Janne que contó con una excelente puesta en escena en la que participaron la cantautora Roxana Mouriño y Dereck Hijmans, quien leyó un poema escrito por Jonás Convalia, y contó con la colaboración de la artista visual Pilar Mena.
Más moda y color
La siguiente en ocupar la pasarela fue la firma «Kavra Formentera» cuya artífice, Ivonne Ruiz, volvió a sorprender con sus particulares diseños textiles y técnicas de estampado en los que la posidonia fue el tema elegido y en los que no faltaron los distintos tonos de verdes, beiges, azules y turquesas basados en fotos submarinas del biólogo Manu san Félix. Este pase contó con una interpretación de la bailarina de la Compañía Nacional de Danza y del Nederlands Dans Theater, Luisa María Arias, que asombró al público presente.
La pasarela de Moda Formentera contó también con los desfiles de las top models Verónica Blume y Almudena Fernández que desfilaron junto a las modelos ibicencas.
Y el asombro continuó con la propuesta de B7&Acho titulada «Its time for choices» en la que se incluyó un mago que deleitó al respetable con algún truco. La propuesta de esta marca apostó por tintes artesanales realizados con óxidos, arenas y tierras volcánicas que convierten a cada pieza de ropa en una obra única, acompañadas por las joyas diseñadas por Mathilde Rouanet inspiradas en la naturaleza de la isla.
La velada continuó con la colección de Alena Vedere, con estampados de diseño propio, formatos «desiguales» y kimonos para lucir sobre un traje de baño en los que rayas de diferentes colores sobre blanco marcaban la diferencia.
Luego fue el turno de la firma «Macramé», liderada por Anabel Costa y que con la propuesta «Sons de mar», apostó por una vuelta de tuerca al estilo ad-lib y en la que el blanco brilló con su presencia en tejidos frescos y veraniegos como el algodón, acompañados de las joyas en plata de Tito Solari.
Casi rozando la medianoche la pasarela siguió con la presencia de las creaciones de Elena Hurtado y las joyas de Lorenzo Pepe.
Hurtado, fiel a su estilo clásico, con ese aire de los años cincuenta que es marca de la casa y las líneas puras, presentó vestidos en estampados geométricos, abrigos cortos en tonos pastel, así como originales sombreros y bolsos a modo de complementos.
El evento continuó con la colección «Imagine» del diseñador Michelle Crocitto inspirada en la obra de grandes pintores en tejidos como la seda y piezas de sastrería clásica.
Los trajes de noche y el vestido de novia no podían estar ausentes y quien mejor que Eva Cardona, diseñadora especialista en este tipo de atuendos que sabe trabajar tejidos bordados y encajes para crear, en este caso, piezas donde los colores potentes como el fucsia y el turquesa estuvieron presentes, así como un original vestido de novia que no dejó a nadie indiferente.
Después fue el turno de la firma Ur-Joies que presentó al público asistente sus últimas creaciones.
El cierre de la edición 2017 de la Pasarela Formentera corrió a cargo de Enric Majoral que aprovechó el lema «Save Posidonia» para mostrar lo mejor de su colección de joyas en oro y plata basadas en esta planta marina, con autenticas cascadas en collares, pendientes y pulseras que brillaron sobre las modelos.
En resumen, una velada completa en la que cada uno de los diseñadores mostró su talento ante un público que se manifestó encantado por un acontecimiento que ha cumplido ya una década.
