Juanjo Giménez Peña (Barcelona, 1963) es director y productor de cine, especializado en cortometrajes. Ganador de un Goya, de la Palma de Oro de Cannes y nominado a los Oscars 2017 por su corto «Timecode», se encuentra estos días en la isla con motivo de la V edición del Formentera Film Festival. Cercano y afable accede a un pequeño cuestionario por parte de Formenteraavui después de una charla coloquio en la que se debatió sobre la industria cinematográfica en el Centre «Gabrielet»
Defensor del cortometraje…
Bueno he hecho muchos cortos y algunos largometrajes. Pero es cierto que en muchas entrevistas que me han hecho me ponen casi como un «militante» del formato de cortometraje que, por supuesto, defiendo. Llevo más de veinte años haciendo películas y nunca he dejado de hacer cortometrajes y «amenazo» con hacer más.
Ganador de un Goya, de la Palma de Oro en Cannes, nominado al Oscar entre 5.000 aspirantes. ¿Qué han significado estos premios?
Los que hacemos cortos sabemos que es difícil escapar de este núcleo minoritario y captar audiencia. El éxito de Timecode produjo salir de ese pequeño «gueto». Es muy difícil que un cortometraje llegue a una sala cinematográfica, salvo en Estados Unidos, y estos reconocimientos contribuyen a que la gente se interese por ellos. Quien se acerca al mundo del corto se lleva una sorpresa al encontrar verdadero cine.
¿Cómo se resume un drama o una historia en 15 minutos?
Yo tengo un problema o una ventaja, según como se mire. Cuando me pongo a escribir muchas veces me salen narraciones cortas y, cuando me meto en un largometraje, tengo que «forzar la máquina». De natural me salen las «cortas» y me siento a gusto con ellas. Por otra parte al cortometraje siempre se lo ha visto como al «hermano pobre» dentro de la industria y creo que hay que luchar contra esto, aunque se van dando pasos a través de festivales como este en Formentera.
Por lo que he sabido eres un «fan» de Luis Buñuel y has tenido el privilegio de que te dieran el mismo premio que a él en Cannes…
Me pareció de justicia nombrarlo al recibir el premio, ya que es uno de mis cineastas de referencia. Él comenzó su carrera con un cortometraje, «El perro andaluz» y con otro que pretendía ser un largometraje pero que tuvo que «cortarlo» en 40 minutos; «Simeón del desierto».
Volviendo a «Timecode». ¿Cómo fue el rodaje?
Se rodó en un fin de semana, solo dos días. Aunque luego llevó una post producción, bastante compleja, de unos ocho meses. Teníamos que coordinar el tema de las cámaras de seguridad que aparecen en el corto y porque el presupuesto era muy limitado.
En cuanto a largometrajes, he investigado y te van las «road movies»…
Sí, aunque el proyecto que tengo por delante escapa de ese género. Me encantan pelis tipo «Infierno sobre ruedas», la primera de Spielberg, o «Paris,Texas» de Win Wenders.
En el encuentro entre directores y productores llevado a cabo dentro del Formentera Film Festival, se habló mucho de financiación. ¿Cómo está en este momento la industria cinematográfica?
Yo tenía como profesor a José Luis Guerín, el del famoso documental «En construcción» y él decía que la palabra «cineasta» nunca debía ir al lado de la palabra «queja» ya que esto genera un tipo de animadversión de la que hay que huir. A los que nos dedicamos a esto, nadie nos ha obligado, pero tenemos que ceñirnos a hacer lo que nos gusta luchando contra «mil» adversidades. Entre ellas el 21 por ciento del IVA cultural. Creo que hay que salir adelante de forma inteligente, uniéndonos a compañeros que trabajan en el sector y mirar el futuro con optimismo.
¿Qué te parece que Formentera tenga su propio festival de cortometrajes bi anual?
Mira, si me invitan a mi me parece fenomenal, (risas). Fuera de broma estoy encantado de haber venido, no conocía la isla y por lo poco que he visto, solo llevo un día aquí, me están entrando ganas de quedarme una temporada.
Además es un placer compartir con los colegas de profesión este encuentro y disfrutar de las películas que se proyectan estos días.